Momentos para elegir

Cada vida es diferente; El único patrón predecible es que todos experimentamos una mezcla de alegría y tristeza, felicidad y angustia, que suele ocurrir de manera impredecible. No importa cuán cuidadosamente planifiquemos, los contratiempos, grandes y pequeños, pueden interrumpir nuestros aviones. Nos instalamos en un buen trabajo, una relación, un vecindario, y luego la vida nos sorprende.

Hace un tiempo falleció un anciano, y cuando sus amigos y seres queridos recuerdan su vida, se preguntaron por qué a menudo parecía tan enojado. Luego, mientras revisaba sus pertenencias personales, su familia encontró uno de sus recibos de sueldo de trabajo de hace mucho tiempo. En la parte superior había escrito: “¡El final de un buen trabajo con este pago!

El comienzo de la ira y '¿Por qué a mí?' ". El estallido escrito a mano conectada algunos puntos para ellos. Lo habían despedido de ese trabajo, y aparentemente nunca se recuperó de esa decepción. Durante más de 30 años, llevó amargura en su corazón. Como resultado, se cerró a los demás, apagando su luz y amor.

Ahora, aunque ser despedido nunca es fácil, piense cómo su vida podría haber sido más feliz si pudiera ver su despido de manera diferente. ¿Y si hubiera buscado ayuda y apoyo y hubiera seguido adelante con su vida? En lugar de preguntar, "¿Por qué yo?" ¿Qué pasaría si podría haber preguntado: "¿Qué puedo aprender de esto? ¿Cómo podría esta decisión ayudarme a ser una mejor persona? En lugar de ser" el comienzo de la ira ", el día en que fue despedido podría haber sido el comienzo de una nueva oportunidad y una vida más sabia, feliz y compasiva.

El dolor y la desilusión de cada persona es diferente, pero todos tenemos una cosa en común: el poder de elegir nuestra respuesta. No podemos elegir si seremos heridos o no, pero podemos elegir si sanaremos o no. De hecho, podríamos decir que la vida es una serie interminable de momentos para elegir, cada día, cómo respondemos a las sorpresas agradables y desagradables de la vida.